04.FENICIOS, TARTESIOS Y GRIEGOS EN OCCIDENTE
¿Fundaron los fenicios Gadir en 1100 a.C.?
Diego
Ruiz Mata / Catedrático de Prehistoria y Académico de Sta.Cecilia.
“Anno octogésimo post Troiam captam( ..) tyria
classis Gades condidit”
Veleyo Patérculo, Historia Romanorum, I,2,3.
Pueden ampliarla pulsando con el ratón la imagen |
Veleyo Patérculo, escritor romano de comienzos del siglo I d.C., nos transmite en este texto que ochenta años
después de la caída de Troya, unos barcos fenicios navegaron a Occidente y
fundaron Gadir. Lo que sucedió en 1100 a.C. Lo mismo nos han trasladado el
geógrafo griego Estrabón, que escribió en
esa época, recogiendo tradiciones y relatos más antiguos, y algunos
autores más. Pero ¿es cierta esta fecha? Es la pregunta de siempre, repetida cien y mil veces. A muchos alegra y conforta decir que sí, pero con la duda de
la certeza en el aire, a sabiendas que la contestación puede ser otra. Es
decir, posponerla a unos siglos más tarde. Ha sido, y lo es, un tema que ha engendrado muchas páginas y debates, y
levantado pasiones. Procuraré contestar los aspectos esenciales, pues en
numerosas ocasiones esta fecha ha arrebatado el puesto al concepto de la
verdadera dimensión histórica fenicia en la Bahía.
Pueden ampliarla pulsando con el ratón la imagen |
Hablando con unos colegas y amigos, nos resultaba paradójico que
mientras aspiramos a parecer y sentirnos
más jóvenes, como el eterno niño volador Peter Pan del siglo XXI, o el profesor
Gustav von Aschenbach de La muerte en
Venecia de T. Mann, tras la visión del joven y hermoso Tadzio, acicalándose
hasta el ridículo para aparentar ser más joven porque la vejez, con su firma
imborrable, le impedía el goce y acercamiento a la belleza personificada en el adolescente polaco, o Dorian Grey cuyo retrato
envejecía por él tras un pacto diabólico por la belleza de la juventud eterna,
otros se sientan atraídos por lo viejo y por la vejez, experimentando el síndrome de Matusalén, en
referencia a ese anciano bíblico del Génesis que vivió casi mil años -969, se
dice- y que es sinónimo de antigüedad, de larga descendencia y de ancestral. Creen muchos que cuanto más antiguo sea el
acontecimiento, adquiere mayor importancia. Lo más viejo no es un factor negativo, pero no
es siempre lo óptimo o el ideal que debe guiarnos. A veces, dudo incluso de la
experiencia y de la sabiduría supuesta que emana en algunos. O
cuando la experiencia se emplea
sólo como término recurrente de algo inexistente y sin fundamento, y no como conocimiento y sentido común o cordura. Giro la cabeza con
los ojos abiertos y es esto lo que, a veces, veo y
percibo muy cerca.
Ampliarla pulsando con el ratón la imagen |
Pueden ampliarla pulsando con el ratón la imagen |
Y todo proviene de unos textos tardíos, transmitidos durante siglos
sin interés de comprobación, y faltos de evidencias, hasta que la arqueología,
más pausada y serena y con materiales menos ilustres en la mano, ha entrado en
acción con su propio criterio. El más antiguo procede de Eratóstenes, que vivió
entre el 280 y 195 a.C, recogido por Estrabón doscientos años después, y dice
así: “…los cuales –los fenicios- navegaron por fuera de las Columnas de
Heracles y fundaron ciudades, no sólo allí, y
también en medio de las costas de Libia –África-, poco después de la guerra de Troya”. Y
este mismo autor, basándose este vez en Posidonio de Apamea, que anduvo por
Cádiz hacia el año 100 a.C., nos informa que las primeras noticias sobre Iberia
se deben a los fenicios, “dueños de la
mejor parte de Iberia, de la Libia, desde antes de la época de Homero”. Y
poco después, C. Veleyo Patérculo,
escribe que “…ochenta años después de la
guerra de Troya (…), la escuadra tiria, la más poderosa en el mar, en la región
más alejada de España, en el extremo del mundo conocido, fundó Cádiz en una
isla rodeada por el océano próxima al continente y separada de él por un
estrecho. Pocos años después, los mismos fundaron Utica en África”. Plinio
el Viejo, que murió en el auxilio valeroso de unos amigos afectados por el
volcán furioso del Vesubio en el año 79 d.C., y Pomponio Mela, nacido en
Tingentera, un pueblecito cercano a Algeciras, se refieren a la fundación de
Gadir, Utica y Lixus –en Larache- en las fechas indicadas, junto a sus templos
dedicados a Melqart, y en referencia a la guerra de Troya. Son los textos más
explícitos, causantes del debate, que han dejado cerradas y abiertas muchas
preguntas y respuestas.
Pueden ampliarla pulsando con el ratón la imagen |
Desde la época helenística advertimos la tendencia a ennoblecer el origen de ciertas ciudades occidentales
partiendo del episodio mítico o histórico de la caída de Troya, que Homero
reflejó en La Ilíada en el siglo VIII a.C. Se ha sobrevalorado al poeta, y a su
guerra versificada, como fuente histórica y temporal, lo que ha propiciado la
confusión en una sola las varias
tradiciones relativas al extremo Occidente y que se ajusten vagamente las
cronologías a la época de los héroes homéricos. Se entremezclan así realidad
histórica, ficción y pseudo-erudición. Y el deseo de ensalzar los arriesgados
viajes al remoto finisterre occidental en la mitología hizo que la bibliografía
helenística se esforzara por hallar héroes epónimos fundadores de colonias.
Pero ni conocemos cuándo se produjo el asedio y destrucción de Troya, ni si este acontecimiento tuvo realidad histórica. Homero,
y su autoridad afianzada durante siglos, ha creado un hito histórico-temporal
poco consistente, que ha cimentado la base de las dataciones fundacionales fenicias occidentales, y entre ellas la de
Gadir. En un momento, sospecho, en el que convenían estas
exaltaciones y anclajes míticos con afanes nacionalistas e imperiales. Todas
las ciudades ilustres antiguas debían tener su origen en Troya o en un héroe
troyano. Un modelo repetido: la Historia-comodín como pretexto y excusa.
Pueden ampliarla pulsando con el ratón la imagen |
Pueden ampliarla pulsando con el ratón la imagen |
Con franqueza, estimado lector, creo que poco importa la conquista
de Troya y la fecha de 1100 a.C. para la fundación de Gadir. Lo que hay que
resaltar es el comienzo de una época que supuso el origen de la civilización
occidental, la vinculación de Oriente, el Mediterráneo y Occidente, a la que se
unieron Roma y el Cristianismo más tarde, y que perduran y se transmiten en nuestros
genes culturales. Y termino con una frase de Fernand Braudel, muy a propósito y
que siempre menciono por concisa y explícita: “Haber sido es una condición de ser”. Qué suerte haber sido, tener
la referencia de la Historia. Pero para seguir siendo es preciso haber sido y
creerlo con firmeza. La duda irreflexiva, las cortinas de los párpados cerradas
al pasado, son los síntomas de un tiempo agonizante y de su falta de dignidad histórica. No sé si importa mucho, hoy.
Me ha parecido muy interesante... Me gusta saber la realidad y no lo conveniente o satisfactorio de las cosas... Lo realmente importante es la verdadera secuencia de la Historia, para comprender y admirar su evolución, comprendiendo las circunstancias que encerraba cada momento...
ResponderEliminar