«Desde 1850»: Giorgio de Chirico
A veces me complico bastante con las notas que me dio Gustavo para que
las fuera publicando. Ya les comenté que sus escritos eran un poco dispersos y algunos
también algo confusos y decidí ─hace unos días─ pedirle permiso
para escribirlos de otra manera y hacerlos un poco más cómodos para mí, por
supuesto respetando el contenido en su totalidad. A Gustavo le pareció muy bien
y no puso el más mínimo inconveniente, me dijo que podía hacer lo que me viniera
en gana. Se lo agradecí infinitamente pues eso me permitía más flexibilidad descriptiva
y podía ─quizás─ expresar de modo más certero sus ideas y sus
criterios. Así que ahora me convertiré en el narrador de sus historias. Ruego
que perdonen esta intromisión pero trataré de no defraudarles.
A Gustavo le encanta
exasperar a su esposa hablándole en bullshit
y eso lo hace a menudo cuando él está concentrado en algo y Elisa le interrumpe
con alguna materia doméstica. Cuando me mencionó esto enseguida hube de
preguntarle qué era eso del bullshit y
me respondió:
─Todo el que está en
el mundo del arte debe aprender este lenguaje, que de eso se trata, y que es
ampliamente utilizado con la función de ocupar un espacio verbal, o textual, de
una sección en la que no hay contenido ninguno. El bullshit es de lo más eficaz ─me decía con una semisonrisa─
cuando se trata de distraer al público cuando en una exposición, en una obra
artística o en un artista no hay ni contenidos ni sustancia.
Después
añadió que antes era una cosa mal vista, pero que de un tiempo a esta parte la
consideración sobre el bullshit ha
cambiado y es una de las cosas que deben ser aprendidas con rigor por todos los
que transitan por el ámbito del arte. No pude sustraerme a la curiosidad de que
me dijese algo en ese, que se me antojaba muy peculiar, lenguaje. Parece que me
leyó el pensamiento y sonriendo dijo:
─Se observan influencias tan diversas como de Caravaggio y Jasper Johns,
se crean nuevas combinaciones de ambos con diálogos que son a la par opacos y
transparentes. La expresividad comienza como un deseo que pronto se corrompe en
una tragedia de la futilidad, dejando sólo un sentido del nihilismo y la
perspectiva de un orden armónico ─y al ver la cara que yo ponía ya no
pudo reprimir la risa abierta que inmediatamente yo seguí.
Elisa nos miraba y hacía un
movimiento de cabeza que supimos interpretar perfectamente. Le pregunté a
Gustavo qué se traía entre manos y me contó que le habían pedido dar una charla
sobre la llamada Pittura metafísica y
sobre Giorgio de Chirico (1888-1973) y que estaba preparando material. Me dijo
que ahora vendría Lina con algunas láminas interesantes. Y así fue, al cabo de
unos pocos minutos llegó Lina con una enorme carpeta de la que empezó a extraer
preciosas y grandes láminas de cuadros de Chirico.
Comenté que este pintor me
atraía muchísimo y Lina dijo:
─Sabrás que se le da
el nombre de «pintura metafísica» al movimiento artístico italiano, que fue
impulsado y creado por Giorgio de Chirico y Carlo Carrà. Sus obras evocan sueños
de plazas típicas de ciudades italianas imaginadas, mezcladas con objetos que suelen aparecer sueltos o
aislados, y representan un mundo misterioso que casi inmediatamente se
relaciona con la mente inconsciente, más allá de la realidad física, de ahí el
nombre de «pintura metafísica» ─y añadió después de una leve
pausa─: eso es lo que me ha explicado Gustavo.
Éste nos ilustró sobre un
curioso aspecto del pintor. Según un estudio bastante reciente parece ser que durante
gran parte de su vida sufrió repetitivos síntomas abdominales, migrañas y una
variedad de disfunciones cerebrales paroxísticas de aparición brusca parecidas
a la epilepsia y que de alguna manera fueron como una fuente de inspiración
para su estilo original de pintura.
También se acercó Elisa a la
amplia mesa y dijo algo que me pareció muy interesante citando al propio
artista:
─Siempre me impresionó
la frase del pintor que decía: «Para
llegar a ser verdaderamente inmortal, una obra de arte ha de escapar de todos los
límites humanos: la lógica y el sentido común sólo interferirán en ella». Creo
que fue hacia 1913, cuando formuló sus ideas sobre la «pintura metafísica».
Gustavo intervino para
precisar:
─Y en 1914 pintó uno
de sus cuadros más apreciados: "El
misterio y la melancolía de una calle", obra evocadora, inquietante, y
sin embargo los elementos que la componen son corrientes y familiares.
Realmente considero que es una obra extraordinaria.
Nos quedamos muy callados
durante unos momentos mirando la lámina tan precursora del surrealismo, con
esos elementos arquitectónicos, sus abundantes sombras y su ambiente
angustioso.
No sé qué me sucedió y hubo
unos instantes en los que no lograba escuchar bien lo que ahora decía Gustavo,
creo que era algo sobre las influencias en los surrealistas como Dalí, Max
Ernst y Magritte. De repente me sentí mal, aturdido. Ese espacio singular,
atemporal y misterioso se parecía demasiado a la extraña calle que me había
llevado tantas veces a mis encuentros con los poetas.
Ignacio
Pérez Blanquer
Académico de Santa Cecilia
Mayo,
2012
Algunas obras de Giorgio de Chirico en un vídeo de YouTube:
Antes de decir nada comentar que la música que ha elegido la persona que ha hecho el vídeo le va cosida a las imágenes. La obra de Giorgio en esta fase de su vida artística te traslada a un lugar de tu mente único, a un lugar íntimo y solo..trasmite soledad....es inquietante y algo triste...En otras de sus obras me ha recordado a Dalí, ese punto de genialidad y locura de creatividad sin límite...Enhorabuena Ignacio me ha gustado mucho , como siempre gracias de nuevo porque aprendo mucho mucho contigo y me haces pensar con tus personajes y conocer un poquito a estos pintores y poetas tan maravillosos que henos tenido a lo largo de la historia. Y nada de lo que he puesto es bullshit¡¡ :D
ResponderEliminarLo que me gusta de los escritos de este blog es que se aprenden muchas cosas de modo no convencional. Gracias y enhorabuena.
ResponderEliminarSalu2.
Magnífico post y muy interesante lo que cuenta sobre el bullshit, que según parece es palabrería destinada a llenar página pero sin fundamento, con la intención de no "mojarse", no vaya a ser que en un futuro el artista llegue a cotizarse.
ResponderEliminarChirico es uno de esos pintores que yo he descubierto en el último año y que me llamó la atención no sólo por su obra, que combina una técnica perfecta, clásica y un sentimiento de angustia, soledad y tormento, sino porque encontramos su influencia en muchos pintores que cultivaron el género fantástico.
ni idea de este señor ....gracias por presentarmelo !quizás pueda entender mejor ahora algunas cosas que para mí eran ...imcompresibles !
Eliminarni idea de este señor ....gracias por presentarmelo !quizás pueda entender mejor ahora algunas cosas que para mí eran ...imcompresibles
ResponderEliminarMi lectura obligada del sábado. Muy bueno Chirico y bastante desconocido, muchas gracias por ponerlo a nuestro alcance de manera tan amena.
ResponderEliminarSaludos.
Era...alguien conocido, pero de esos que no recuerdas, muy entretenida y con conocimiento de la materia , como siempre, el día que nos encontremos físicamente brindaremos con los cinco sentidos, gracias.
ResponderEliminarInquietante este Chirico. Sus cuadros me parecen como sueños, rozando a veces la pesadilla, pero me resultan inspiradores. A Ignacio, las gracias por descubrírmelo, contando además una historia que se lee con curiosidad e interés.Sonia WZ
ResponderEliminarInquietante este Chirico. Sus cuadros me parecen como sueños, rozando a veces la pesadilla, pero me resultan inspiradores. A Ignacio, las gracias por descubrírmelo, contando además una historia que se lee con curiosidad e interés.Sonia WZ
ResponderEliminar