ENCUENTROS EN LA ACADEMIA (374)
MIRANDO HACIA EL OESTE
Era una bonita tarde, como casi todas la de
nuestro otoño. Miraba por la ventana y quedaba absorto por el encanto de mi
solitaria calle que siempre mira hacia el Oeste. Allá arriba, unas nubes
lejanas revoloteaban lentas y jugaban con los colores azul y naranja. Pendientes
de un hilo de memoria vinieron a mi mente estos versos de Fernando Pessoa: «Tenemos quienes vivimos, / una vida que es
vivida / y otra vida que es pensada, / y la única en que existimos / es la que está
dividida entre la cierta y la errada». Fue un soplo procedente del Poniente,
allí estaba Portugal. Casi siempre a nuestra espalda. La nube más grande se
convirtió en una bola naranja revestida de blancos y grises.
Unamuno
ya nos habló de una colisión constante ─que habría que superar─ entre la «suspicacia
portuguesa» y la «arrogancia española», generada por faltas de comunicación y
muchas guerras. ¿Mirar a la espalda, mirar de frente?... Pessoa repetía dentro
de mí: «No soy nada. / Nunca seré nada. /
No puedo querer ser nada. / Aparte de esto, tengo en mí todos los sueños del
mundo».
Pensé
en eso que se suele denominar iberismo; el impulso de carácter político tendente a unir
Portugal y España en un único bloque peninsular. Los partidarios de
avanzar en la integración política, económica y cultural de Portugal y España
llevan bastante tiempo intentando coordinar una estrategia para presentar una
candidatura atractiva al Parlamento Europeo en 2019. Claro, habrá que seducir,
primero, a los electores y después a los políticos, de que la fundación de una Comunidad Ibérica formada por España,
Portugal y también por Andorra, es la única posibilidad, no solo de superar todos
los problemas actuales, sino de caminar juntos en la dirección de convertirnos
en una potencia mundial en muchos órdenes.
Cierto
es que el iberismo tiene mucho de enigma político y es curioso observar que cuando
se realizan encuestas sobre reforzar más la vinculación entre Portugal
y España, el grado de aceptaciones asombroso, pero este tema está totalmente al margen de toda agenda política.
Quizás ─lamentablemente─ para casi todo el mundo, hablar de «iberismo», es poner
sobre el tapete una singularidad o un discurso intelectual inane.
Los iberistas estiman que la península fue la primera promotora de la globalización y del mestizaje y que estamos en un mundo con un futuro azaroso en el cual vuelven a erigirse muros. Nos recuerdan que poblamos una tierra, al sur de los Pirineos, en la parte más occidental de Europa, en cuya frontera sur ─allí donde se unen las aguas del Mediterráneo y el Atlántico─ está el punto crítico donde se forja nuestro “espíritu ibérico”, en palabras de Fernando Pessoa. Y que somos una civilización, fruto del cruce de otras anteriores, que fue la primera de las europeas en adentrarse en tierras desconocidas, llevando nuestras culturas y lenguas al mundo.
Los iberistas estiman que la península fue la primera promotora de la globalización y del mestizaje y que estamos en un mundo con un futuro azaroso en el cual vuelven a erigirse muros. Nos recuerdan que poblamos una tierra, al sur de los Pirineos, en la parte más occidental de Europa, en cuya frontera sur ─allí donde se unen las aguas del Mediterráneo y el Atlántico─ está el punto crítico donde se forja nuestro “espíritu ibérico”, en palabras de Fernando Pessoa. Y que somos una civilización, fruto del cruce de otras anteriores, que fue la primera de las europeas en adentrarse en tierras desconocidas, llevando nuestras culturas y lenguas al mundo.
“Solo hay dos naciones en
Iberia: España y Portugal”, dijo el escritor. “La región que no forma parte de una, forma
parte de la otra. El resto es filología”.
Ignacio Pérez Blanquer
Académico de Santa Cecilia
Siempre me he preguntado el porqué de que teniendo un país tan bonito y atractivo tan cerca siempre le hemos dado la espalda. No tenía ni idea de la existencia del movimiento iberista pero es una cosa linda, de hermandad y colaboración, que hay que mover. Este artículo me ha tocado.
ResponderEliminarEsse artigo me tocou profundamente,pois não tinha idéia desse movimento,mas diante de um artigo tão esclarecedor eu o apoio totalmente,a forma simples com que expôs o problema e ao mesmo nos indica o caminho para a solução é brilhante. Creio que muitas pessoas vão sentir o mesmo.
ResponderEliminarQué bonito sería que hubiera líderes políticos capaces de llevar adelante estas ideas, pero hay lo hay y tenemos lo que tenemos, no hay más. Me apunto lo que dice Pessoa, "Aparte de esto, tengo en mí todos los sueños del mundo".
ResponderEliminarGracias a la Academia por este escrito que nos hace mirar hacia otra parte.
El sueño de la Iberia...
ResponderEliminarTal vez sea un sueño, un anhelo...Pero la realidad se impone. España y Portugal llevan siglos dándose la espalda. Cómo es posible que aquellos dos reinos que un día se repartieron el mundo, hoy son incapaces de las más mínimas aproximaciones. Negligencia de sus políticos o temor de otras naciones( Reino Unido) por KAS consecuencias del atrevido resultado. No lo sé.
Profesor P. Blanquer, mi en horabuena por yo hermoso artículo que nos lleva a reflexionar sobre cuestiones políticas tan cercanas y tan entrañables. Corre tiempo en donde la fugacidad de un twit es más importante que hablar de la esencias de dos países que viven de juntos y se espalda.
Todo es filología.
ResponderEliminarCuando lo leí el pasado martes, tuve la intención de hacer un comentario a tu magnífico artículo, pero por distintas razones no pude hacerlo, sin embargo no quiero que mi impresión se quede en el aire sin hacértelo llegar.
ResponderEliminarLos que te conocemos, sabemos de tu interés hacia Portugal y su idioma que ahora te esfuerzas en aprender, pero al margen de esto, hay que apoyar esa idea del Iberia o que ha tenido muchísimos defensores a lo largo de la historia.
La creación de una federación ibérica de naciones, ha sido un proyecto defendido por importantes personalidades políticas, intelectuales y Artísticas, pero hay que reconocer que no ha tenido, lamentablemente, demasiado apoyo a nivel popular. Para conseguir esa deseada y conveniente unión entre España y Portugal, habría que comenzar por hacer llegar y enamorar a la gente, de ese proyecto.
Estou encantada com seu artigo professor Blanquer é muito contundente ,preciso é esclarecedor. Não sabia desse conflito que estava ocorrendo na europa,agora que estou ciente a apoio com grande convicção,estar informada dessa causa tão nobre me fez ver o mundo com outro entendimento. Estarei atenta ao desenlace que acredito será positivo e de grande impacto para todo o mundo.
ResponderEliminarMe encanta, el comienzo me atrae porque me encanta observar y pensar lo que me viene a la mente detrás de los cristales, es algo que siempre me ha atraido mucho. El verso al que haces mención de Pessoa, es la realidad de todas las vidas, la tuya, la mía, la del que pasa por aquí y de todo el mundo. En cuanto a lo de España y Portugal, creo que es algo que podría ser perfectamente posible. Me encanta tu claridad para expresar las cosas y el enganche que tienes para seducir al lector, al menos yo así lo siento.
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