ENCUENTROS EN LA ACADEMIA (132)
De colisiones con el
futuro
Es posible que todos tengamos una hilera
de frases que nos indiquen rumbos para cruzar por la existencia, son como las
rayitas de una rosa de los vientos particular. Probablemente, para muchos, una
de estas frases-flecha sea la de Ortega y Gasset: «La vida es una serie de colisiones con el futuro».
Cierto es que nuestras vidas están
plagadas de expectativas con lo venidero y también lo están las Artes, las
Ciencias y las Humanidades. Estamos, irremediablemente, en la era de Internet,
y todas esas disciplinas se enfrentan a próximos y sucesivos choques con la
posteridad. Y hay obstáculos, sin duda; uno de ellos es la abundancia de
información. Se ha calculado que en tiempos de Cervantes y Shakespeare existían
unos dos mil libros impresos; es muy posible que los hombres cultos de la época
conociesen los que más destacaban de ese par de miles de volúmenes, y en esto gozaban
de amplia ventaja aquellos que sabían latín y francés. Distintos proyectos de
biblioteca en la Red ponen hoy, a disposición de todos, varios millones de
libros de forma gratuita y con poco más que el esfuerzo de apretar una tecla.
¿Qué es ser culto hoy? En 2012 se publicaron más libros en el mundo que en toda
la década de los 60; es tanta la cantidad de libros que no podemos leer que
nuestra ignorancia crece mucho más que nuestro conocimiento.
El entorno literario no se verá solo
afectado por la abundancia, sino que será muy distinto, entre otras cosas, por
la invasión masiva de los «e-books» o libros electrónicos. El «e-book» posee un
enorme potencial que irá desarrollándose paulatinamente. No es difícil prever que pronto los libros
electrónicos tengan bandas sonoras como el cine, y que sea posible escuchar
palabras y recomendaciones leídas por el propio autor de la obra. Es muy
probable también que los libros contengan todo tipo de imágenes e ilustraciones
e incluso vídeos de paisajes y localizaciones ─ficticios
o reales─ de allá por donde
discurra la trama. Y ustedes lo saben: hoy importan más las modas que los modos.
Hay un fenómeno, aún incipiente, pero
que puede llegar a tener un gran alcance, e incluso dar lugar a la aparición de
nuevas formas literarias estables. Consiste en la participación de seguidores o
fans en las creaciones, estos tendrán la posibilidad de contribuir con anotaciones
que podrían ser incluidas en los propios textos. Hoy existe, y está en franco crecimiento, lo
que se ha dado en llamar «fanfic» (o
FF, "ficción de fans"). Se trata de una novedosa narrativa (o no tan
nueva) en la que los fans utilizan los ambientes, los personajes y las
situaciones de un relatos de creadores ajenos ─a partir
de novelas, series de TV, personajes de comics u otros─ para engarzar con ellos sus propias historias e
interpretaciones.
Inevitablemente la vida es ─en muchos aspectos─ un
complejo dilema entre el pasado y el porvenir. Este dilema quizás es lo que sintetizaba
Schopenhauer, hace bastante más de un siglo, con la siguiente frase: «Qué bueno sería comprar libros si a la vez
pudiésemos comprar el tiempo necesario para leerlos».
Ignacio
Pérez Blanquer
Académico
de Santa Cecilia
Muy interesante.
ResponderEliminarEstoy sorprendido por el fenómeno del FANFIC, no había escuchado nunca nada sobre eso, y opino que es muy interesante y dará para hablar bastante en el futuro.
ResponderEliminarCreo que con pocas palabras no se puede plantear mejor la cuestión.
ResponderEliminarEl "fanfic" en español también tiene su lugar en las redes sociales.
«Fanfic» latino en facebook
Realmente interesante pero yo no disfruto de la misma forma con las lecturas electrónicas.
ResponderEliminarCuando dejen de existir los e-books de papel, las posibilidades de que haya una quema de libros será más difícil. Es en lo que pienso cuando veo tanta información y tan poco tiempo para asimilarla. Pienso en alguien que me quite algo de tarea. Alguien ducho en el arte de seleccionar.
ResponderEliminarVerdaderamente, este futuro-presente de tinte orwelliano que planteas da algo de miedo. Habrá o hay tanta información que ser culto será un duro ejercicio.
Me encantan tus artículos clarividentes. Los que instalan el futuro en el presente. (ya que pienso que el pasado está pasado de moda)
Muy interesante.
Sorprendente título de un artículo que tiene alguna relación con éste: La insoportable pesadez de leer
ResponderEliminarMuy interesante. Como siempre, se "impone" la reflexión. Gracias.
ResponderEliminarMagnífica reflexión, Ignacio.
ResponderEliminarLas nuevas tecnologías avanzan tan rápido que el hombre no puede estar a su altura. Las nuevas aplicaciones para ordenadores, teléfonos y demás "aparatos" nos convierte en muchos casos en parte activa de la creación de otros.
ResponderEliminarLa proliferación de libros e información es contradictoria en un mundo que huye de los problemas y que sólo busca descanso en el cotilleo, en el escándalo y en la morbosidad. Leer supone pensar y no todos están dispuestos.
Soberbio artículo.