28 de febrero. DÍA DE ANDALUCÍA
FELIZ DÍA DE ANDALUCÍA
Romana y mora, Córdoba callada.
Málaga cantaora.
Almería dorada.
Plateado Jaén. Huelva, la orilla
de las Tres Carabelas...
y Sevilla.
Manuel Machado
El Día de Andalucía
Cada 28 de febrero es tradicional observar cómo las banderas blancas y verdes adornan los balcones de las casas de los pueblos y ciudades de la comunidad y algo que nunca puede faltar en el Día de Andalucía, es degustar el «desayuno del molinero; que consiste en un pan rústico untado en aceite de oliva extra virgen.
Para conocer su origen, hay que remontarse al 28 de febrero de 1980. Ese día, los ciudadanos andaluces acudimos a las urnas para votar en el Referéndum Autonómico, que triunfó en siete de las ocho provincias (Almería fue la única donde no alcanzó el techo legal).
Dada la clara voluntad autonómica del pueblo andaluz, las Cortes modificaron la Ley de Referéndum para permitir la incorporación de la provincia almeriense al proceso. Un año después, en 1981, se aprobó el Estatuto de Autonomía que, tras la Constitución, es la norma más importante de la comunidad.
El referéndum para otorgar plena autonomía a la región estaba originalmente destinado a celebrarse en 1936, pero el estallido de la Guerra Civil lo impidió. Eso significó que Andalucía tal y como la conocemos hoy en día, no cristalizó hasta 44 años después. Tal vez por ello, los andaluces damos mucha importancia a su logro como autonomía y marcan este día como uno de los más importantes que celebrar en su calendario.
Actualmente cuenta con un población, a finales de 2024. de 8.663.175 personas, es la comunidad autónoma más grande en términos de población y la segunda en extensión. Pero además, la comunidad autónoma de Andalucía está oficialmente reconocida como nacionalidad dentro de España.
La figura de Blas Infante
Andalucía pidió su autonomía en el siglo XX, pero la identidad andaluza era ya una realidad desde hacía mucho tiempo y es que comenzó con el alzamiento revolucionario de Topete en Cádiz en el siglo XIX. Una de las figuras más relevantes a la hora de crear los símbolos que identifican a Andalucía y a sus habitantes fue Blas Infante, conocido como el "padre de la patria andaluza". Él fue el encargado de recuperar la bandera blanca y verde andalusí, diseñar el escudo que lleva y además compuso el himno andaluz antes de que lo fusilasen en 1936.
Fue en 1914 cuando Blas Infante esboza el que sería el primer escudo que llevaría la bandera blanca y verde para representar a Andalucía. El pensador político argumentaba la necesidad de "volver a levantar un templo al Hércules Heleno, al divino héroe creador de la leyenda hesiódica, hijo de la fortaleza, de lo infatigable y de la conciencia del poder. Por esto, si yo pudiese elegir un escudo para Andalucía, señalaría sin vacilar el de la gloriosa Cádiz con su divisa elocuente: Dominator Hercules Fundator".
La idea de representar a Hércules en la bandera andaluza está íntimamente ligado a la ciudad de Cádiz y es que se basa en el mito de que la capital gaditana fue fundado por el héroe. Alfonso X, cuando reconquistó Cádiz en el siglo XIII, quiso escenificar en el escudo de la ciudad a Hércules y este símbolo perdura hasta el día de hoy.
Lo que comenzó siendo una idea de Blas Infante se terminó materializando en la Asamblea de Ronda que se celebró el 13 y 14 de enero de 1918, por lo que quedó establecido que el Hércules fundador- el del blasón de Cádiz- se convertiría en el símbolo central de la bandera blanca y verde con el escudo de este héroe mitológico que tiene la bandera gaditana. El modelo gaditano sirvió de lienzo para que el héroe griego apareciese entre dos columnas que simbolizan la columna norte al Peñón de Gibraltar sosteniendo a dos leones y la columna Sur al Monte Hacho (o al Monte Musa de Marruecos. La leyenda «Andalucía por sí, para España y la Humanidad» se encuentra a sus pies.
En esta fecha de efemérides del Día de Andalucía, les comentamos la Romanización de la Bética o de nuestra Gades. Nuestra bahía es un paraíso que debemos cuidar, conjunto armónico de cielo, tierra, río y mar ya desde la antigüedad. ¿Serían las Hespérides? o ¿Eritia?, isla en la que Hércules mata a Gerión para robarle sus bueyes. Citamos el templo de Hércules en Sancti Petri, el Heracleum de los romanos. Julio César visitó dicho templo y ante la estatua de Alejandro Magno dijo" a mi edad él había capturado el mundo y yo no he hecho nada". Ya en el libro II, capítulo XVIII los "Commentarií de Bello Gallico" César nos habla de la producción naval gaditana " ... ordenó a los gaditanos que construyeran diez naves de guerra y se preocupó de la construcción de muchas más en Hispalis, se llevó a Gades todo el tesoro y todos los tesoros del templo de Hércules, envió allí seis cohortes para su protección".
Citamos la importancia de Columela y sus consejos en sus libros de agricultura, el garum, las "puellae gadiianae", la familia de los Balbo y, como no, la piel de león sobre los hombros de Hércules en el escudo de Cádiz y la inscripción "non plus ultra" y los vinos que, ya en la antigüedad, aprovechando los ríos cercanos, los suspiros de los vientos y, sobre todo, el cariño de los propietarios y trabajadores, se sacaban de uvas de ensueño de nuestra tierra, vinos ya pregonados por poetas de la antigüedad. Y Menesteo, y Estrabón ... Y los mares, sobre todo, el Mare Nostrum, que, por cierto, hay que cuidar. Ya .Salustio tenía conciencia ecológica cuando nos dice en la "Conjuracion de Catilina" capitulo XIII "para qué recordar hechos que nadie cree, salvo los que lo han visto, que muchos particulares (prioatis) han destrozado montes y ganado terreno a los mares". Asusta mirar la contaminación en algunos ríos y mares, menos mal que el Guadalete ya no está olvidado. Asusta mirar como se pierde y desaparece nuestra sierra.
Tomado del Discurso de Investidura del académico de Santa Cecilia, Emilio Flor Jiménez
Hacer clic sobre la imagen para visualizar el vídeo. Canta "Niña Pastori"
Un himno de amor, de paz, de esperanza de canto a la tierra, a sus gentes: por la Libertad, por España y la Humanidad.
Gonzalo Díaz-Arbolí
Académico de Santa Cecilia
Comentarios
Publicar un comentario